Para garantizar la asistencia humanitaria a los migrantes que llegan a Panamá, tras atravesar la espesa selva del Darién, el Ministerio de Seguridad Pública (Minseg) ha creado la Unidad de Seguridad Fronteriza Humanitaria (Usfroh), la cual estará integrada por unidades del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), quienes concluyeron su proceso de formación y capacitación sobre seguridad fronteriza, destinados a la protección de los derechos humanos migratorios.

Un total de 150 unidades del Senafront recibieron esta capacitación para realizar un trabajo más completo, en la protección de los derechos humanos de la población migrante que se encuentra en el país, así como instrucción en materia de seguridad en las áreas fronterizas.

El ministro de Seguridad Pública, Juan Manuel Pino, señaló que Panamá está sufriendo la llegada de un número plural de migrantes, de diferentes nacionalidades, por lo que se creó en el Senafront una unidad especial para darle atención a estas personas, a fin de que reciban el trato humanitario que requieran, mientras estén en territorio panameño.

“Panamá es respetuoso del Derecho Internacional Humanitario, y así lo hemos demostrado durante esta pandemia; el año pasado, fueron mejorados los aspectos humanitarios y de estadía de los migrantes en Panamá”, destacó el titular del Minseg.

El ministro Pino precisó que existe en estos momentos un flujo controlado de aquellos migrantes que ingresan a Panamá a través de la frontera en Darién y en su paso hacia Costa Rica. Lo que se busca, agregó, es tener esa misma coordinación con las autoridades colombianas.

“Próximamente, tendremos una reunión con autoridades de la República de Colombia, con autoridades de Cancillería y de Seguridad, con miras a suscribir un acuerdo de flujo controlado para mejorar el tema migratorio entre ambos países”, apuntó el Ministro.

La nueva unidad es el resultado operativo de una estrategia intersectorial cuya meta es resguardar la seguridad, dignidad y vida de las personas migrantes en su trayecto hacia los países de Norteamérica, a través de la selva de Darién.

“Esta dimensión clara y precisa es la que sin duda puede consolidar una buena práctica en materia de protección a personas migrantes y que esperamos poder continuar consolidando cada vez más, complementando los esfuerzos que realiza el Gobierno de Panamá frente a los retos que implica la gestión de la migración de forma segura, ordenada, regular y digna en el contexto de fronteras”, expresó Santiago Paz, jefe del Centro Administrativo Global y de la misión de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Panamá.

La formación integral de los miembros de Usfroh, es fundamental para darle empuje y cohesión a los esfuerzos de los actores involucrados en promover la buena gestión de la migración y alcanzar óptimos niveles de seguridad en el marco de una cultura de paz, a través de estrategias de prevención al delito y la protección de los derechos humanos.

Durante este acto, en el que estuvo presente el director del Servicio Nacional de Fronteras, Oriel Ortega, también se reconoció el trabajo de los “Centinelas de la Patria”, quienes fueron galardonados con la Medalla al Servicio Distinguido, por su valentía, vocación de servicio y labor destacada en el combate contra el tráfico de drogas y el crimen organizado.

En esta ceremonia también participaron las embajadoras Ilse Smiths de Holanda y Martina Klumpp de Alemania, la directora del Servicio Nacional de Migración, Samira Gozaine, Alejandra Rossero del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y en representación del defensor del Pueblo, Eduardo Leblanc, asistió Jonathan Santana, director de Relaciones Internacionales de la Defensoría del Pueblo.