La República de Panamá ha asumido el liderazgo en la región centroamericana, como el país en donde se ha logrado de manera efectiva la destrucción de armas ilícitas y municiones, aseguró el director interino del Departamento de Seguridad de la  Organización de Estados Americanos en Panamá, Guillermo Moncayo

Durante la quinta ceremonia de destrucción de armas del año 2022 y vigésimo segunda de la gestión del presidente de la República, Laurentino Cortizo Cohen, Moncayo ponderó el trabajo del Gobierno Nacional a través del Ministerio de Seguridad Pública (Minseg), en la destrucción de armas, acción que además de evitar más muertes, demuestra un combate frontal de parte de Panamá contra la delincuencia.

La OEA, precisó Moncayo, a través de su Programa de Asistencia para el control de armas y destrucción de municiones en Centroamérica, “certificó el liderazgo demostrado por Panamá en la región durante los últimos tres años, con una efectiva ejecución de acciones contra el tráfico ilícito de armas de fuego y municiones”.

Reiteró además, que no solo la OEA continuará respaldando la iniciativa panameña en esta gestión contra la delincuencia, sino que además la Unión Europea también mantiene su apoyo al trabajo que realiza Panamá, en cuanto a la destrucción de armas y municiones incautadas a las organizaciones criminales.

El Minseg procedió este viernes con la ceremonia de destrucción de mil 28 armas de fuego, municiones y proveedores, decomisadas en distintas acciones operacionales de la Fuerza Pública.

Se trata de la vigésimo segunda ceremonia de destrucción de armas que se efectúa en el país, desde que el presidente de la República, Laurentino Cortizo Cohen, asumió la Presidencia de la República el 1 de julio de 2019.

En esta ceremonia fueron destruidos 524 revólveres, 245 pistolas, 56 escopetas, 16 armas de pellet, 46 rifles, 133 fusiles, tres subametralladoras y cinco niples.

En nombre del presidente de la República, Laurentino Cortizo Cohen, el ministro de Seguridad Pública,  Juan Manuel Pino, indicó que en esta nueva ceremonia,

efectuada en la sede de la Policía Nacional, se saca de circulación para siempre armas que estaban en poder de los grupos delincuenciales y que ahora ya no harán más daño a la sociedad.

El ministro Pino ponderó el trabajo de las unidades de los estamentos de seguridad, quienes mantienen el alto compromiso de decomisar la mayor cantidad de armas ilegales posibles, con el propósito de proteger la vida y bienes de los ciudadanos.

El Ministro aprovechó para agradecer a la Organización de Estados Americanos (OEA) la reciente donación de un incinerador, primero de su tipo en el país, con una capacidad para destruir hasta 100 mil municiones por día, que incluye municiones de las armas calibre 50.

Desde el 1 de julio de 2019 hasta la fecha, el gobierno del presidente Cortizo Cohen ha destruido un total de 21 mil 359 armas de fuego.