El acuerdo incluye 200 buses que serán acreditados por ambos países y que pasarán directamente, sin detenerse en Paso Canoas, con el fin de mejorar el flujo migratorio en la frontera de ambos países. Los presidentes de Costa Rica y Panamá expresaron que dan su espaldarazo a la convocatoria efectuada por su homólogo de México para celebrar una reunión de jefes de Estado de la región el 22 de octubre, con el fin de analizar la crisis migratoria y lograr un flujo ordenado y seguro de estas personas. Metetí, Darién. 6 de octubre 2023. Panamá y Costa Rica acordaron que, a partir del lunes 9 de octubre, 200 buses que trasladan migrantes irregulares serán acreditados para su paso expedito, sin detenerse en Paso Canoas, para seguir su destino por Centroamérica. El anuncio fue realizado por los presidentes Laurentino Cortizo Cohen, de Panamá, y Rodrigo Chaves, de Costa Rica, en la conferencia de prensa efectuada tras concluir una gira de trabajo por Darién que incluyó el sobrevuelo en comunidades por donde ingresan los migrantes, un recorrido por la Estación de Recepción de Migrantes (ERM) en Lajas Blancas y un Gabinete Binacional en el que emitieron una declaración conjunta para hacer un llamado a los países de la región con relación a la crisis migratoria. “Panamá y Costa Rica tenemos una relación especial; Costa Rica es un país amigo, por eso hemos acordado hacer un flujo migratorio lo más ordenado posible”, dijo el presidente Cortizo Cohen, quien explicó que los buses serán debidamente verificados por ambos países, con conductores avalados, y tendrán seguro internacional. El presidente Chaves señaló que la medida ayudará a desahogar el flujo de migrantes en Paso Canoas para que Costa Rica sienta lo menos posible ese flujo migratorio y con el fin de que los habitantes no observen casas de campaña en sus poblados ni los otros problemas que acarrea la migración irregular. Los presidentes de Costa Rica y Panamá dieron un espaldarazo al llamado efectuado por el mandatario de México para una reunión urgente el 22 de octubre de los jefes de Estado de la región para tratar la crisis migratoria. Al respecto, el presidente Cortizo Cohen dijo que esa reunión del 22 de octubre se debe efectuar sin excluir a ningún país, deben acudir tanto los de origen de los migrantes, los que son paso y las naciones receptoras finales de estas personas. “Es un problema tan grande que se requiere la participación de todos los eslabones de la cadena. Buscamos que en esa reunión se logre un flujo migratorio lo más ordenado posible”, expresó el presidente panameño. Cortizo Cohen explicó que, en su caso, no va a ir a México a un viaje diplomático, y exigió que el encuentro que se ha convocado sea una reunión franca que tenga como objetivo que estén presentes todos los países involucrados y que se logre un acuerdo para un flujo migratorio ordenado y seguro. Sobre la reunión a que ha convocado el presidente de México, el presidente Chaves indicó que Costa Rica espera resultados concretos y la consideró como una oportunidad para mejorar el flujo migratorio más ordenado y seguro. Con relación al anuncio del Departamento de Estado de Estados Unidos, de que retomará las repatriaciones de ciudadanos venezolanos que crucen de forma ilegal la frontera, el presidente Cortizo Cohen señaló que es una medida que puede ser efectiva, aunque no es suficiente. Durante el Gabinete Binacional, se efectuó una presentación del contexto migratorio por parte del ministro de Seguridad Pública de Panamá, Juan Manuel Pino, y del ministro de Seguridad de Costa Rica, Mario Zamora Cordero. La directora del Servicio Nacional de Migración (SNM), Samira Gozaine, señaló que desde 2009 al 2021 ingresaron por la trocha de la selva de Darién 248,050 personas, y destacó que solo en el año 2021, pospandemia, entraron 133,726 personas. Precisó que en 2022 ingresaron de forma irregular 248,284 personas y en lo que va del 2023 han pasado 415,104, la mayoría de Venezuela, Ecuador, Haití, China y Colombia. Gozaine indicó que el 85% de los migrantes ingresan por el poblado de Bajo Chiquito y el 15%, por Canáan Membrillo. Luego de atravesar los ríos Tuquesa y Chucunaque, llegan a la Estación de Recepción de Migrantes en Lajas Blancas y en la otra estación, en San Vicente, donde se levanta el registro de control y biometría; se les da alimentación, agua y, en algunos casos, se efectúa evacuaciones de las personas que llegan en estado crítico de salud. El director del Servicio Nacional de Fronteras, (SENAFRONT), Jorge Gobea, presentó un recuento de la migración irregular desde la expulsión por las instituciones de seguridad nacional de los grupos guerrilleros del sector fronterizo. Señaló que en la actualidad los estamentos de seguridad participan en la operación contra el crimen organizado en la selva de Darién, lo que ha dado como resultado 626 capturas de sujetos vinculados al crimen organizado y 27 embarcaciones dedicadas al tráfico de humanos. El ministro de Ambiente, Milciades Concepción, resaltó que la migración irregular afecta áreas comarcales de Guna Yala y Emberá Wounaan; estimó que se han acumulado 6 mil toneladas de basura en la zona selvática y dijo que para atender el daño ecológico causado se estiman B/.12 millones.